A bombo y platillo, hasta en las televisiones generalistas, como si de algo importante se tratara, nos dan la noticia que el amigo Shia Labeouf ha sido declarado el actor más rentable en Hollywood .Y yo digo: "¿ein?". ¿Qué baremos, que tonterías se utilizan para llegar a semejante cuestión? Si calibramos la noticia como se debe, nos daremos cuenta que la importancia de este "notición" es como aquel que dice nula. Parece ser que la forma de establecer esa rentabilidad es dividir lo cobrado en la película y la recaudación en taquilla. Por esa regla de tres, el actor más rentable del año pasado no es otro que Optimus Prime, el jefe de los autobots en la divertida segunda parte de "Transformers" (y que yo diga algo así de una película de Mr. Bay es algo irrepetible) Porque, seamos sinceros: Cuando uno va a ver "Transformers" como que no va a ver la cara de niño bobalicón del amigo Shia, sino las transformaciones y luchas que hay entre autobots y decepticons, (vale, vale, y los que somos tíos también fuimos a babear con la Megan Fox). Y no creo que los honorarios de Optimus sean muy elevados... a no ser que contemos lo que se agenció el equipo de CGI que se dedicó a construir por ordenador al susodicho robot.
¿Ha hecho más películas ese año? Parece ser que no, así que el premio a la rentabilidad es tan fácil como conseguir que te fichen para una superproducción que sabes que es una apuesta segura en taquilla y luego a esperar que te nombren el actor más rentable. Porque por ejemplo: Robert Downey Jr. anda por la cuarta plaza (al fin y al cabo esto de la rentabilidad hollywoodienese no es otra cosa que una lista más a los que tan aficionados son en los Estados Unidos) gracias a "Iron man" y "Sherlock Holmes"...
Apuestas bastantes seguras. Pero este actor también gusta de acercarse a otro tipo de cine como "El solista", fallida película de Joe Wright, director de "Expiación" (por cierto que esta película tiene el honor de pertenecer a otra lista: en ella sale el considerado mejor traje de la historia del cine) y claro, la rentabilidad cómo que se le ha ido al garete.
Y luego va y resulta que el amigo Shia ya lleva dos años consiguiendo tan "ansiado" galardón. Claro : todos corrimos a ver lo chulo y guapo que salía al estilo Marlon Brando en la película "Indiana Jones y la calavera de cristal". Y es que está claro que si no hubiera sido por él, la película hubiera sido un fiasco en taquilla...Espero que hayan notado la ironía pero aun con un Harrison Ford en horas bajas el amigo Shia no le llega ni a la suela de las botas para enfundarse el látigo y sombrero más famosos de la historia del cine. ¡Por Dios!
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