Este viernes viene marcado por el primer blockbuster americano: "Iron Man 3", el personaje de la Marvel que vuelve a la acción lejos de sus amigos "Vengadores" con los que triunfó el verano pasado. Y puede ser esta la última vez que veamos a Ronbert Downey Jr. enfundándose la armadura dorada ya que su contrato estaba estipulado para tres películas y parece ser que el amigo Robert anda dudando si seguir haciendo del adinerado, mujeriego y petulante Tony Stark... bueno suponemos que nada que pueda arreglar un buen cheque con algún cero de más.
Para esta tercera parte, La Marvel ha escogido como director (ya dijimos en un post anterior que creemos que Robert también influyó en la decisión) a Shane Black, un tipo que será recordado como el guionista de "Arma Letal" aunque también ha firmado los de "El último boy scout" y "El último gran héroe", películas de acción con un extraño toque de humor de cierto corte incluso paródico que se incrementó en su primera película como director, "Kiss, kiss, bang, bang" que protagonizaban el problemático Val Kilmer y el por entonces también problemático... Robert Downey Jr.
Y ese humor también impregna el espíritu de esta tercera parte, un humor socarrón que tan bien le va a Downey para seguir siendo el héroe de la función sin mucho esfuerzo. O puede que sí porque esta vez su enemigo es el Mandarín, uno de sus más antiguos rivales y también de los más esperados por muchos fans del hombre de hierro, un enemigo que lo llevará hasta límites inimaginables y que hará a Tony Stark replantearse incluso su forma de actuar y de ser.
Siguen acompañando a Tony Stark su inseparable Pepper Potts y James Rhodes y para el papel del malvado Mandarín se ha contratado al gran Ben Kingsley que seguramente habrá disfrutado con su papel como solo los grandes actores saben hacerlo.
Bienvenidos de nuevo al universo Marvel. Comienza la Fase 2. Y lo hace a lo grande.
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