Es más que difícil competir en unos tiempos en lo que todo lo que te rodea son festivales de cine. Unos porque tienen una tradición y porque la ciudad que los envuelve son un marco incomparable: Venecia. Otros porque apuestan por convertirse en festival cinematográfico de referencia cueste los que cueste: Roma. Y otros porque poco a poco y con la exquisitez (cada año) de una elegida selección de películas van creándose un hueco en este difícil mundo festivalero y tienden a convertirse en un grande: Toronto. Tal vez por eso José Luis Rebordinos, por segundo año director del festival de Donostia, ha buscado unir todas esas características: Domostia no será Venecia pero tiene su propia belleza y fuerte personalidad, no será Roma ya que su prespuesto en estos tiempos de crisis es cada vez más dolorosamente escaso pero ljuchará por mantener su status de gran festival y no será Toronto pero Rebordinos sabe de cine, sabe buscar y sabe pulir los errores del año anterior, del pasado año, en el que la edición del festival no dejó un buen sabor de boca.
Claro que también hay que decir que el festival donostiarra cumple 60 años y ante toda fecha redonda suele ponerse la carne en el asador. Y por el momento a Rebordinos le está saliendo la jugada bastante bien. En tres días los habitantes de an Sebastián han visto pasar por la alfombra roja a estrellas como Richard Gere, Susan Sarandon, Tim Roth, John Travolta, Ben Affleck, Benicio del Toro y el director Oliver Stone. Para aquellos puristas que buscan la esencia del cine en cada película esto les puede parecer una "frivolité" pero hay que admitir que un festival también se alimenta de estas figuras y qju son estas figuras las que consiguen poner al festival ante los medios de comunicación, en el candelero, vamos.
Pero es que de cine también se va servido. La inauguración ha corrido a cargo de "El fraude" protagonizada por Gere y Sarandon. mezcla de thriller económico y drama familiar, conseguido relato en el que Gere ejecuta de forma primorosa a un tiburón de las finanzas, esos tipos despiadados que no dudan en quedarse con todo lo nuestro y que además pueden humanidad. Un ejercicio noble, sin florituras, para una película tan honesta como necesaria.
También Ben Affleck ha saido respaldado del festival gracias a "Argo" su tercer trabajo como director. Una especie de thriller político que recuerda muy a las claras las películas de espías de los años 70 y que aúna además ciertas escenas con una fuerte carga de profundidad al mundillo hollywoodyense. Basado en hechos reales, este film cuenta a partir de la toma de la embajada de los Estados Unidos en Irán en 1979 como seis de aquellos rehenes consiguen escapar en el caos. Refugiados en casa del embajador canadiense, un especialista de la CIA en operaciones especiales llamado Tony Mendez (Affleck) urde un arriesgado plan para sacarlos del país de forma segura. Y los convierte en equipo de cine para hacer una película: "Argo".
Oliver Stone, John Travolta y Benicio del Toro han estado en el festival para presentar "Salvajes" el nuevo film del controvertido director que se basa en una obra de Don Winslow y que ha generado cierta división de opiniones (para variar con Stone) Por si eso fuera poco en la rueda de prensa a Stone le da por arremeter contra Bush y contra Aznar. Genio y figura. Otra razón por la que Stone y Travolta están en la ciudad es que han sido premiados con el Donostia junto a otros tres actores de la talla de Dustin Hoffman, Tommy Lee Jones y Ewan McGregor.
Las primeras películas en sección oficial ya huelen a premios. "Dans la maison" del eterno enfant terrible, François Ozon y que parece, esta vez sí, haber dado en la diana con la historia de Germain, profesor de francés que corrigiendo los deberes de sus nuevos alumnos observa a un chico que prefiere sentarse discretamente en la última fila, “desde donde se puede ver a los demás” y que demuestra tener un afilado sentido de la observación. Alentado por el profesor, empieza una redacción de tipo folletín, penetrando en el mundo de dos familias: una perteneciente a la pequeña burguesía, con sus esperanzas y frustraciones; y otra más cercana a la vida intelectual y artística. La realidad y la ficción se entremezclan hasta confundirse en un juego ingenioso. Pero ¿qué oscuras intenciones esconde el joven y hasta dónde llegarán sus maquinaciones?
No vamos a descubrir la cuadratura del círculo si decimos que nuestro cine está en crisis (o eso se lleva diciendo desde tiempos inmemoriales). Donostia siempre ha sido una plataforma para el cine español. Este año trae "El artista y la modelo" de Fernando Trueba, "El muerto y ser feliz" de Javier Rebollo, "Lo imposible" el más que esperado nuevo trabajo de Juan Antonio Bayona tras "El orfanato", "Atraco" de Eduard Cortés o la nueva "Blancanieves" de Pablo Berger, Una original visión del clásico cuento ambientada en el sur de España en los años 20, cargada de aventuras, emoción y humor donde Blancanieves es Carmen, una bella joven con una infancia atormentada por su terrible madrastra, Encarna. Huyendo de su pasado, Carmen emprenderá un apasionante viaje acompañada por sus nuevos amigos: una troupe de Enanos Toreros. La película, en blanco y negro y sin palabras, ha conmocionado a la crítica del festival que la ha puesto por las nubes. Muchos nos acordamos ahora de "The artist" y será buena la hora en que podamos compararlas. Seguramente "Blancanieves" saldrá vencedora ante la oscarizada película a la que le faltaba toda la honradez de la que hace gala la ya citada "El fraude".
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